Muestran un efecto inhibitorio de la genisteína sobre el crecimiento de células de adenocarcinoma rectal bien distinguido. Se trata de uno de los cultivos oleaginosos más esenciales del mundo y un alimento básico en Oriente. Otros, en cambio, piensan que es originaria de Australia y que se ingresó en Asia transportada por las aves migratorias. Se estima que la sustancia de la soja está en los hipocólitos deshidratados (partes del eje caulinar que se sitúan debajo de los cotiledones durante la germinación). En este contexto, el papel de la dislipidemia en la ocurrencia de fenómenos como la aterosclerosis, principal nexo conector entre las diferentes nosologías consideradas dentro del espectro de ECV, fue enfatizado por numerosos estudios clínicos y experimentales5-diez. Además de esto, podría impedir o moderar la descalcificación ósea relacionada con el cese de actividad de los estrógenos en la menopausia.
Conociendo las funciones que los estrógenos despliegan en el cuidado de las funcionalidades homeostáticas de múltiples sistemas, como el sistema cardiovascular, reproductivo, metabólico, esquelético y inquieto, estos compuestos han concentrado la atención de investigadores por su potencial preventivo y terapéutico. Desde hace décadas, se ofrece que la existencia de isoflavonas de soja en la dieta de las ciudades asiáticas se relaciona con menor incidencia de distintos tipos de cáncer, (mama, próstata, colon) y enfermedades coronarias15,16. Ciertas de estas indagaciones abogaban por la substitución de la proteína animal por proteína de soja para achicar los escenarios de colesterol total y LDL-c.
Salud Y Nutrición
“Una activación de los receptores PPAR conduce a una prevención del síndrome metabólico (diabetes, obesidad, hipercolesterolemia…)”, algo probado con ratones a los que se indujo a la obesidad con una dieta hipercalórica. El conjunto al que se le administró isoflavonas de soja no ganó tanto peso como el grupo que no las tomó. Las isoflavonas son un género de fitoestrógenos y la soja parece ser la fuente más abundante de este conjunto químico. A continuación se expondrá la clasificación de los diferentes fitoestrógenos y los principales alimentos que los contienen.
Los artículos de soja de “segunda generación” son aquellos derivados de la soya, mediante desarrollo de extracción química, como los aislados de proteína de soya y la harina de soja. Estos artículos son elementos muy recurrentemente utilizados en alimentos como hamburguesas vegetales, suplementos proteicos, y fórmulas infantiles, y como aditivos no saludables para mejorar las especificaciones de los alimentos procesados47. La soja, soya o Glycine max es una planta leguminosa muy consumida en los países de Asia oriental, más que nada por sus semillas, que son ricas en proteínas de alta calidad (poseen los 8 aminoácidos esenciales en la edad avanzada). Longitudinal study of soy food intake and blood pressure among middle-aged and elderly Chinese women.La ingesta habitual de alimentos de soya se asoció inversamente con los PA sistólicos y diastólicos, especialmente entre las mujeres de edad avanzada.
Dosis Cotidianas De Soja
Estos dos últimos son producidos a través de la fermentación de los porotos de soja con granos. Este proceso de fermentación condiciona supuestamente una mayor biodisponibilidad de las isoflavonas en esta clase de artículos, debido a que aumenta el contenido de las formas agliconas de las isoflavonas45,46. Muchas de las bacterias utilizadas para esta fermentación son capaces de hidrolizar los conjugados glucosídicos a los que están unidas las isoflavonas45.
En el estudio llevado a cabo por los mismos investigadores se examinó el potencial antioxidante de la daidzeína sobre líneas celulares hepáticas Huh-7 y HepG2 que han recibido un tratamiento previo con esta isoflavona. La daidzeína no presentó actividad de barrido de radicales, sin embargo, incrementó de forma importante la transcripción génica y la actividad de la catalasa85. La activación plaquetaria es un paso crítico en la patogénesis de la trombosis, acontecimiento que puede conducir a aterosclerosis o infarto cerebral o miocárdico fatal o no fatal.
A lo largo de muchos años la soja y sus artículos derivados se han promocionado como el colmo de la comida sana. Al fin y al cabo, en los países asiáticos donde más soja se consume, hay menor incidencia de diabetes, obesidad, y anomalías de la salud cardiovasculares. Sería lógico pensar que si comemos lo mismo que los japoneses, estaremos tan sanos como los japoneses.
Sin embargo, a pesar de las diferencias en las cantidades observadas a nivel urinario, las proporciones a nivel plasmático son casi similares. El tiempo medio para alcanzar las máximas cantidades a nivel plasmático descritas son de 8,4 y 7,4 horas, para la genisteína y daidzeína, respectivamente42. Debido al aumento continuo de la población mundial, y al incremento en la demanda por fuentes alimentarias proteicas, la producción mundial de soya prosigue en desarrollo.
Provecho De Las Isoflavonas De La Soja
Mujeres asiáticas postmenopáusicas que consumen una dieta alta en soja, y por ende, rica en isoflavonas, presentan menor incidencia de ECV que las occidentales21-24. Gran parte de los estudios en humanos, completados anteriormente con isoflavonas, se han enfocado eminentemente en las ventajas cardiovasculares que éstas tendrían a partir de su capacidad de afectar los escenarios plasmáticos de colesterol, en individuos hipercolesterolémicos25-30. Otro de los inconvenientes de la soja es la presencia del ácido fítico, que es un antinutriente que se une a minerales como el calcio, el magnesio, el hierro y el zinc, impidiendo que nuestro organismo los pueda absorber.
De todas formas, las isoflavonas asimismo tienen reconocidos efectos ventajosos, como la reducción de los síntomas asociados a la menopausia y la prevención de algunas enfermedades como la diabetes tipo 2. Asimismo dado que las mujeres orientales tengan la mitad de peligro de desarrollar cáncer de mama que las occidentales “consideramos que es debido a las isoflavonas que han tomada a lo largo de la temporada de desarrollo”, indica el médico. La pérdida de hormonas en esta etapa de la mujer asimismo acarrea sofocos, bajada de la consistencia ósea y peligro de fractura al debilitarse el hueso. Está comprobado científicamente que las isoflavonas de la soja asisten a mitigar los efectos de la menopausia de aquellas mujeres que no siguen un régimen hormonal sustitutorio. En cambio, en su contribución a reducir el peligro de aparición de cánceres hormonodependientes actúan como oponentes. Quizá lo mucho más preocupante sean las leches sustitutivas y papillas para bebés con un alto contenido de proteína procesada de soja, que puede ser hasta 11 ocasiones mucho más concentrada que en los artículos para adultos.