El geólogo estadounidense Walter Álvarez, coautor adjuntado con otros tres investigadores de la teoría de la extinción de los dinosaurios, visitó el pasado 17 de marzo el Instituto Geológico y Minero de España . El doctor Álvarez se encuentra en España estos días con motivo de su investidura como Doctor Honoris Causa en la Universidad de Oviedo, que tendrá sitio el próximo 28 de marzo. «Una razón por la cual la mayor parte de los intentos para eliminar ratas no tuvieron éxito es pues, de la misma muchas otras especies, han evolucionado para hacer en frente de la toxicidad», enseña. En el momento en que las ratas están con un alimento nuevo, «generalmente solo toman una pequeña cantidad; y si se enferman, muestran una destacable capacidad para evitar esa comida de nuevo pues asocian el gusto y el olor con la reacción negativa», añade.
Even with so much knowledge I cánido not believe that dares to say that there was land and 6… Además de estudiar la proliferación de plantas tóxicas mientras que los dinosaurios estaban vivos, Gallup y Frederick examinaron si las aves y los cocodrilos (asimismo relacionados) podían desarrollar aversiones gustativas. Se dieron cuenta que las aves, en lugar de conformar aversiones al gusto, han creado aversiones a las características visuales de lo que sea las enferme. En un estudio previo en el que diez cocodrilos fueron alimentados con diversos tipos de carne, algunas ligeramente tóxicas, Gallup descubrió que, al igual que los dinosaurios, los cocodrilos no desarrollaban aversiones aprendidas del gusto. Las primeras plantas con flores , llamadas angiospermas, aparecen en el registro fósil bastante antes del impacto del asteroide y justo antes de que los dinosaurios comenzaran a ocultar gradualmente. Gallup y su exalumno Michael J. Frederick, ahora de la Facultad de Baltimore, afirman que conforme las plantas evolucionaban y desarrollaban defensas tóxicas , los dinosaurios continuaron comiéndolas a pesar del malestar gastrointestinal .
El Meteorito Y La Extinción De Los Dinosaurios
A lo largo de años, los científicos han debatido sobre la causa de la extinción del Cretácico entre el impacto de un enorme asteroide o una época de enorme actividad volcánica. Según explicó Hull, bastante gente ha especulado que los volcanes fueron importantes para el acontecimiento de la extinción. En cambio, basado en sus resultados, los gases de las erupciones pudieron haber desempeñado un importante papel en el momento de dar forma a distintas especies surgidas después de la extinción, en sitio de ser los impulsores del acontecimiento inicial. Por tanto, el impacto y las extinciones hicieron una oportunidad para que novedosas especies evolucionaran y el vulcanismo del Decán contribuyó a la lenta restauración de los ecosistemas tras el acontecimiento. seguramente, el estudio que zanjó posibles polémicas fue el publicado en Science en el año 2010, un panel internacional de especialistas de Europa, EE UU, México, Canadá y Japón.
La teoría más extendida sobre la desaparición de los dinosaurios de la faz de la Tierra culpa al impacto de un gran meteorito hace unos 65 millones de años en lo que el día de hoy es la Península del Yucatán, en México. El violento choque, que abrió un cráter submarino de unos 200 km de diámetro, no solo ocasionó el objetivo del reinado de estos animales míticos, sino también terminó con más del 70% de todas y cada una de las especies vivas del mundo. Ahora, novedosas pistas arrojan información sobre lo que ocurrió a lo largo del impacto del asteroide que acabó con los dinosaurios hace unos 66 millones de años. Según unos pequeños fragmentos de roca hallados en Texas, el asteroide golpeó con tanta fuerza que vaporizó un abultado lecho de rocas que había debajo, arrojando gas al lado de una cortina de fragmentos rocosos que salieron despedidos de la superficie. La temperatura se elevó a unos 155 grados centígrados, con lo que la zona de devastación llegó a más de 1600 kilómetros del centro del cráter en minutos. Imaginad por un instante que algunas especies de dinosaurios hubieran logrado sobrevivir a ese invierno nuclear y que, en los años siguientes, el incremento de la salinidad de los mares o la llegada de un cambio brusco de temperatura echara por traste su aptitud de adaptación al medio.
Walter Álvarez, Creador De La Teoría De La Extinción De Los Dinosaurios, Visitó El Instituto Geológico Y Minero De España
Con el pasar de los años esta capa se fue disolviendo, cayendo en parte a l atierra, dando permiso que la luz del sol regresara lo bastante a fin de que la vida resurgiera desde los pocos sobrevivientes que había. Se descubrió una cubierta geológica o estrato rico en iridio, ocupando todo el mundo y que data de la temporada de la enorme extinción. Este elemento químico no está de forma común en la superficie de la Tierra, pero sí en el magma de su interior, tal como en esta antigua capa a gran profundidad y en los meteoritos. Aparentemente una gran roca de unos 15 kilómetros de ancho se estrelló en lo que el día de hoy es Chicxulub, México. Según los especialistas, una roca debería tener un ancho mínimo de 10 kilómetros de diámetro para provocar en la Tierra un cataclismo capaz de aniquilar a la mayoría de las especies. Pese a que todos y cada uno de los días somos bombardeados por pequeños fragmentos de rocas del sistema del sol que entran en la atmósfera, normalmente llegan a la Tierra con un tamaño pequeñísimo, o no lo bastante grande para ocasionar algún daño importante.
Los dinosaurios, sobre todo esos más enormes, fueron los primeros afectados por la falta de comida y recursos. El misterio de la extinción de los dinosaurios sigue ahí, y los paleontólogos y geólogos prosiguen discutiendo sobre el origen de su desaparición. Mientras que hacen las cuestiones correctas y reciben las respuestas primordiales, les recordamos que en Vandal Random hemos elaborado nuestra propia guía de cómo podría ser rememorar un animal obsoleto. “La actividad volcánica en el Cretácico Tardío ocasionó un acontecimiento de calentamiento global gradual de precisamente 2 grados, pero no una extinción masiva”, dijo el estudioso Michael Henehan, quien compiló los registros de temperatura para el estudio. “Varias especies se movieron hacia los polos norte y sur, pero volvieron a zonas más centrales bastante antes del impacto del asteroide”. Hablamos, nos informan en Gizmodo, de una nueva hipótesis que promete poner patas arriba la concepción tradicional que hemos tenido hasta la fecha de la extinción de los dinosaurios.
Si bien la ciencia ahora ha establecido una datación y un fundamento de esta situación, en la actualidad gracias al avance de la ciencia aparecen más detalles y resultados de estudios sobre ello y se han anunciado más teorías e, incluso, algún viable cambio de fecha en algunos casos. Sin embargo, investigadores de la Facultad de Albany (EE.UU.) creen que la historia puede contarse de otro modo y que no fue la roca espacial la única culpable del exterminio, sino más bien algo bien distinto. Según comentan, la aparición de plantas tóxicas combinada con la incapacidad de los dinosaurios para asociar el gusto de ciertos alimentos con el riesgo fue en realidad lo que los puso en la picota. Estas situaciones ahora habían reducido drásticamente la población de dinosaurios en el momento en que el asteroide se estrelló. La teoría del impacto extraterrestre proviene del descubrimiento de que un estrato de roca que data precisamente de la temporada de la extinción es rico en iridio. El iridio es raro en la Tierra pero está en los meteoritos con exactamente la misma concentración que en este iridio.
Las datas concuerdan a la perfección;hace 66 millones de añosque los dinosaurios se extinguieron y la caída del meteorito, con lo que se demuestra, que las fechas cuadran en el instante culminante exacto del comienzo de la extinción. Derivando con ello en causas fatales para todos y cada uno de los seres vivos de la tierra en ese instante y dando fin a la era del Cretácico. La teoría del vulcanismo argumenta que una sucesión de enormes erupciones volcánicas en las Traps del Decán, en la India, tuvieron sitio antes del asteroide asociado al cataclismo que acabó con 2 tercios de las especies vivas que habitaban la Tierra a finales del Cretácico. “Los volcanes tienen la posibilidad de provocar extinciones masivas por el hecho de que dejan libre varios gases, como el dióxido de azufre y de carbono, que pueden alterar el clima y acidificar el planeta”, dijo Hull en un comunicado de la universidad. “Pero los trabajos recientes se han centrado en el instante de la erupción de lava en lugar de en la liberación de gases”. Los científicos calculan que el asteroide golpeó la Tierra con una fuerza mil millones de veces mayor a la de lasbombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki.
A principios de la década de 1980, los científicos de esta facultad californiana Walter Álvarez, Luis W. Álvarez (premio Nobel de Física y padre de Walter), Helen Michel y Frank Asaro se dieron cuenta que una capa de arcillas del límite Cretácico/Terciario se encontraba altamente enriquecida en el elemento químico Iridio. Si apreciamos los réptiles que hay hoy en dia, se podría deducir que no hubouna extinción totalde los dinosaurios, si no que solo subsistieron aquellos que tenían la capacidad de amoldarse a la situación de aquel momento (teoría de Darwin). En un caso así, el cambio climático podría ser una definición idónea para desencadenar finalmente el resultado final que hoy día todos conocemos. Sin embargo, esta hipótesis no tiene por qué ser contraria a la del impacto del asteroide.
Los investigadores rastrearon a lo largo de millones de años (desde hace160 a 66 millones de años) las especies que se dieron a conocer y las que desaparecieron y estimaron las tasas de especiación y extinción a lo largo del tiempo. Los desenlaces muestran que 10 millones de años antes del impacto del asteroide, los dinosaurios ya estaban en ocaso a nivel mundial, afectando tanto a carnívoros como los tiranosaurios, como a grupos herbívoros, como los triceratops. Sin embargo, un aparato internacional de investigadores de la Facultad de Yale publicaron una investigación en la revistaSciencedonde aseguraron que el encontronazo ambiental de las erupciones masivas ocurrió bastante antes del acontecimiento de las extinción y, por tanto, no pudo ser la causa. Otra de las teorías que mucho más apoyan los estudios científicos realizados hasta la fecha es que los volcanes acabaron con los dinosaurios.
En los convocados mares, el plancton, base de la cadena alimenticia del océano, se vio muy perjudicado, y los niveles de acidez del océano cambiaron de manera tan brusca que las primordiales familias de braquiópodos y esponjas de mar desaparecieron. Los cielos se nublaron y llenaron de ceniza a lo largo de décadas, marchitándose la mayoría de la vegetación y alterando para toda la vida los equilibrios de millares de ecosistemas en todo el globo. La diversidad de especies de planeta se redujo a más de la mitad, y todavía se desconocen las causas específicas, aunque cada vez nos aproximamos mucho más a sus posibles detonantes. No obstante, según un reciente estudio publicado en Nature Communications en el mes de junio de 2021, antes de que el asteroide provocase su extinción, los dinosaurios ahora estaban en ocaso. “La cuestión de por qué razón los dinosaurios no aviares se extinguieron hace 66 millones de años sigue sin resolverse debido a la tosquedad del registro fósil”, asegura el estudio.